UNIVERSO: AGUJEROS NEGROS SUPERMASIVOS DESENTIERRAN EL MAYOR ENIGMA CÓSMICO

 

¿Los Agujeros Negros Supermasivos Desentierran el Mayor Enigma Cósmico en 60 Años?

Imagina un universo donde los monstruos más temibles —los agujeros negros— no solo devoran estrellas, sino que lanzan partículas con la fuerza de un saque de tenis profesional a través del vacío interestelar. Suena a ciencia ficción, ¿verdad? Pero un nuevo estudio de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU) podría haber resuelto un rompecabezas cósmico que nos ha eludido desde 1962: el origen de los rayos cósmicos de ultraalta energía, las partículas más letales y enigmáticas del cosmos.


El Misterio que Nos Persigue desde la Guerra FríaDesde los años 60, los telescopios terrestres han captado destellos de algo extraordinario: partículas subatómicas —principalmente protones y núcleos atómicos— zumbando a velocidades cercanas a la de la luz, cargadas con energías de hasta 10²⁰ electronvoltios. Para ponerlo en perspectiva, eso equivale a la potencia de una pelota de tenis golpeada por Serena Williams a 200 km/h... contenida en algo más pequeño que un átomo.Estas no son "rayos" en el sentido literal (un nombre heredado de la era pionera de la astrofísica), sino mensajeros del caos universal. Provienen de entornos extremos: supernovas explosivas, estrellas de neutrones giratorias o, ahora, posiblemente, los corazones glotones de galaxias enteras. Pero ¿qué acelera estas balas cósmicas a niveles que eclipsan incluso al Gran Colisionador de Hadrones por mil millones de veces? La respuesta podría estar en los vientos furiosos de los agujeros negros supermasivos.Vientos Cósmicos: Los Aceleradores Ocultos de los Agujeros NegrosEn el epicentro de casi todas las galaxias, incluido nuestra Vía Láctea con su residente Sagittarius A*, yace un agujero negro supermasivo. La mayoría duermen tranquilos, como el nuestro, sin suficiente "comida" estelar para activarse. Pero cuando se despiertan —devorando hasta varias masas solares al año—, liberan un espectáculo aterrador: vientos ultrarrápidos que rugen a la mitad de la velocidad de la luz.Estos chorros no son un capricho; son el rechazo violento de materia que el agujero negro no puede tragar del todo. Descubiertos hace apenas una década, ya sabemos que remodelan galaxias: expulsan gas, frenan la formación de estrellas y dictan el destino de mundos enteros. Pero el equipo de la NTNU, liderado por la profesora asociada Foteini Oikonomou, el doctorando Domenik Ehlert y el postdoc Enrico Peretti, vio más allá. En un paper reciente en astropartículas —el campo que une lo microscópico con lo macroscópico—, proponen que estos vientos actúan como catapultas naturales."Partículas como protones o núcleos enteros quedan atrapadas en estos flujos turbulentos", explica Oikonomou. "La fricción y el magnetismo las impulsan a energías estratosféricas, explicando no solo la intensidad, sino la composición química observada en un rango específico de energías que otros modelos ignoran". Es una hipótesis elegante: alinea datos de observatorios como el Pierre Auger en Argentina con simulaciones de vientos black-hole, superando sospechosos previos como estallidos de rayos gamma o brotes estelares hiperactivos.¿Peligro para los Viajeros Estelares? La Cara Oscura de la RadiaciónAfortunadamente, nuestra atmósfera actúa como escudo: estos rayos cósmicos se desintegran en duchas de partículas inofensivas antes de llegar al suelo. Para tripulaciones de aviones, el riesgo es mínimo —la radiación solar de baja energía es el verdadero villano cotidiano. Pero para astronautas en misiones a Marte o más allá, esta radiación ultraalta es una amenaza real, aunque rara. "Es poco probable que una partícula atraviese a un humano", admite Oikonomou, "pero suma a la exposición crónica en el espacio profundo".Otras teorías —desde chorros de plasma black-hole hasta galaxias en fiebre estelar— han sido "buenas apuestas", dice Ehlert, "pero carecían de evidencia concreta". Los vientos de NTNU encajan como un guante, y lo mejor: son testeables. "Usaremos detectores de neutrinos en los próximos años para validar esto", añade Oikonomou. Si confirman, reescribiremos libros de texto.¿El Fin de un Enigma... o el Inicio de Otro?Por ahora, la respuesta es un cauteloso "tal vez". La emoción científica late fuerte —estos hallazgos no son un 'eureka' rotundo, sino un 'quizás' que ilumina caminos—. Si los agujeros negros son los arquitectos de esta radiación, nos obliga a repensar su rol: no solo destructores, sino forjadores de la vida cósmica misma.









https://youtube.com/shorts/pag9h-rrGGkFuente: https://www.sciencedaily.com/releases/2025/10/251005085639.htm(Imagen creada con IA) 

Entradas más populares de este blog

TECNOLOGÍA CUÁNTICA: OBSERVAR EL TIEMPO CUESTA MIL MILLONES DE VECES MÁS QUE HACERLO AVANZAR

TECNOLOGÍA CUÁNTICA: UN NUEVO CHIP MARCA UN PASO IMPORTANTE HACIA LA VENTAJA CUÁNTICA

UNIVERSO: ASTRÓNOMOS DESCUBREN FORMA “DE ACEITUNA” DE UNA SUPERNOVA